Berlusconi el rey de los payasos

Si es que siento debilidad por Berlusconi y sus comentarios grotescos, porque en estos tiempos que corren, que no oyes nada más que desgracias y penas, oír al bufón italiano tiene su gracia, aunque sea un personaje impresentable, donde los haya.

Despues de que en un encuentro con Obama y Señora, donde demostró hacia Michele Obama una admiración indebida, sacando a relucir ese Don Juan Tenorio, trasnochado que lleva dentro, provocando una mirada asesina del presidente americano, ha vuelto a meter la pata, pero esta vez hasta el cuello.

En un mitin ayer, por la noche, decía textualmente, según 20 Minutos

'Tengo que daros saludos, saludos de un hombre, cómo se llama, cómo se llama, un minuto, era alguien bronceado....Barack Obama'.


Comentario que ya usó el año pasado y que levantó una gran polémica, por la carga de racismo que llevaba implícita, pues este año, se ve que la gracia le hizo gracia, valga la redundancia, y decidió usarlo de nuevo, pero incluyendo en el comentario a Michele Obama, al decir que ella también está bronceada, porque va ala playa con su marido.

Le han llovido las criticas por todas partes, y con razón, ya que lo han tachado de racista, de nuevo y de hacer quedar a Italia y a los italianos en el más ruin de los ridículos, cosa que por otro lado me alegra, porque así podemos compartir el ridículo hecho por nuestro Presidente, el Sr. Zapatero, en el tema de sus hijas y tocamos a menos ración por cabeza.






Claro que todas estas cosas se solucionarían, si alguien le pusiese al payaso Berlusconi un bozal.

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